LABOR DE LA
JUNTA DE MAYO
El lapso comprendido
entre mayo y diciembre de 1810 tuvo como figura gravitante a Mariano Moreno.
Durante su permanencia en la
Junta , la labor de gobierno fue cada vez más definida en
mostrar que se trataba de un nuevo orden diferente al colonial.
Así, en materia
internacional, la junta inició actividades diplomáticas imprescindibles, tanto
como punto de apoyo para contrarrestar los posibles embates portugueses y
españoles, como más adelante para apoyarse en su garantía y para viabilizar la independencia
de estos territorios.
Desde un punto de
vista económico, también la junta marcó un cambio de dirección sustancial con respecto al periodo colonial. Se autorizó
la libertad de comercio, pero también se reglamentó el manejo portuario, por
otra parte se lanzó una política proteccionista a la producción agrícola. En lo
cultural, se destacó fundamentalmente la creación de un periódico, la “Gaceta”,
en la que Mariano Moreno volcó todas sus ideas y propuestas.
Desde el punto de
vista administrativo, el cambio más representativo fue la aparición de criollos
en el desempeño de cargos de relevancia en la administración y en lo militar se
inició la militarización de las milicias.
¿Hubo una
intención independentista en los sucesos?; ¿Se trató realmente de una
revolución?
Responde las
preguntas a partir de la lectura de la ficha.
El movimiento que históricamente conocemos bajo la
denominación de Revolución de mayo, fue solamente una sustitución de
autoridades, realizadas en un clima de mínima violencia por una minoría audaz y
decidida, con formación intelectual nutrida de los conceptos
filosóficos-políticos divulgados en el fin del siglo XVIII, así como en las
directivas expuestas por los conductores del pensamiento liberal español
desarrollado en las cátedras de las universidades rioplatenses…Pero, esos
hombres traducían un ánimo deliberado y
firme: la estructuración de un sistema unitario y centralizado de gobierno,
capaz de asegurar a los hombres del régimen su predominio ideológico y personal. Berazza.
El pueblo reunido y armado.
Los hacendados criollos y comerciantes no monopolistas
son las clases que encabezan la revolución, quienes la inician y tras de las
cuales concurren las otras clases populares. El programa económico de las
clases directivas de la revolución consistía: en lo exterior, en el desarrollo
de los vínculos económicos con el mercado mundial, para esto contaron, como es
sabido, con todo el poderoso apoyo del gobierno inglés… En lo interior,
conservar y extender los vínculos económicos con las provincias, el monopolio
porteño de intermediación entre el mercado mundial y el mercado americano. Pero
este programa porteño ya no era el programa general de todas las fuerzas
revolucionarias. Lucía Sala y equipo. Artigas, Tierra y Revolución.
En los últimos años
una vasta historiografía se ha encargado de criticar los presupuestos
ideológicos que dominaron las interpretaciones sobre los procesos
independentistas hispanoamericanos, al postular la hipótesis de que tales
movimientos no fueron ni la manifestación de sentimientos nacionales, ni
nacieron de la impugnación de sectores socioeconómicos con intereses opuestos a
la metrópoli, sino que surgieron como respuesta al vacío de poder provocado por
la ocupación napoleónica. Marcela Ternavasio. Historia de la
argentina. 1806-1852.
Cabe preguntarse pues cuál fue la opinión respecto al
actuar a nombre de Fernando de quienes
lo guiaron en sus primeros y decisivos pasos a lo largo de 1810. En general se
considera a Mariano Moreno como uno de los más decididos partidarios de esta
postura, quien escribió: El misterio de
Fernando es una circunstancia de las más importantes para llevarla siempre por
delante, tanto en la boca como en los papeles públicos y decretos, porque es un
ayudante a nuestra causa el más soberbio; porque aún cuando nuestras obras y
conductas desmienten hacerles dudar cuál de ambos partidos es el verdadero
realista. Eduardo Azcuy Ameghino.
Nuestra gloriosa insurrección. La revolución anticolonial de mayo de 1810.
Es difícil desentrañar el posible carácter
independentista de los sucesos de 1810, principalmente porque la Revolución rioplatense
no definió claramente sus objetivos…Ateniéndonos a los documentos de época,
éstos fueron reiterativos en negar el propósito independentista de mayo de
1810…Manejándonos con un sentido estricto, con los hechos ocurridos, resulta
claro que ni en 1808, 1809 y 1810, el Río de la plata estuvo preparado para la
independencia…en esos años era un agudo descontento con respecto al régimen colonial,
pero no implicaba una decisión en cuanto a una ruptura abrupta con el pasado.
Si analizamos las características de los cambio
operados, la manera cómo presentaron, y el grado de participación popular en el
movimiento, tendremos la pauta sobre si corresponde aplicar el término
revolución o no...Los sucesos de mayo de 1810 no revelan una profundidad de
cambios propia de una revolución. Apenas si produjo la desaparición de la
autoridades virreinales, sin establecerse formalmente la disolución del vínculo
a la metrópoli…La revolución no se hizo en una semana, sino en el correr de los
años en que se fueron madurando conceptos y criterios y fue abriéndose paso una
orientación diferente, nueva, con sus errores y aciertos, daría pie a la nueva
nación americana. Alfredo Traversoni. Historia del Uruguay.