domingo, 27 de septiembre de 2015

SEMANA DE MAYO. BUENOS AIRES 1810

LABOR DE LA JUNTA DE MAYO
El lapso comprendido entre mayo y diciembre de 1810 tuvo como figura gravitante a Mariano Moreno. Durante su permanencia en la Junta, la labor de gobierno fue cada vez más definida en mostrar que se trataba de un nuevo orden diferente al colonial.
Así, en materia internacional, la junta inició actividades diplomáticas imprescindibles, tanto como punto de apoyo para contrarrestar los posibles embates portugueses y españoles, como más adelante para apoyarse en su garantía y para viabilizar la independencia de estos territorios.
Desde un punto de vista económico, también la junta marcó un cambio de dirección sustancial  con respecto al periodo colonial. Se autorizó la libertad de comercio, pero también se reglamentó el manejo portuario, por otra parte se lanzó una política proteccionista a la producción agrícola. En lo cultural, se destacó fundamentalmente la creación de un periódico, la “Gaceta”, en la que Mariano Moreno volcó todas sus ideas y propuestas.
Desde el punto de vista administrativo, el cambio más representativo fue la aparición de criollos en el desempeño de cargos de relevancia en la administración y en lo militar se inició la militarización de las milicias.

¿Hubo una intención independentista en los sucesos?; ¿Se trató realmente de una revolución?
Responde las preguntas a partir de la lectura de la ficha.

El movimiento que históricamente conocemos bajo la denominación de Revolución de mayo, fue solamente una sustitución de autoridades, realizadas en un clima de mínima violencia por una minoría audaz y decidida, con formación intelectual nutrida de los conceptos filosóficos-políticos divulgados en el fin del siglo XVIII, así como en las directivas expuestas por los conductores del pensamiento liberal español desarrollado en las cátedras de las universidades rioplatenses…Pero, esos hombres traducían  un ánimo deliberado y firme: la estructuración de un sistema unitario y centralizado de gobierno, capaz de asegurar a los hombres del régimen su predominio ideológico y personal.   Berazza. El pueblo reunido y armado.

Los hacendados criollos y comerciantes no monopolistas son las clases que encabezan la revolución, quienes la inician y tras de las cuales concurren las otras clases populares. El programa económico de las clases directivas de la revolución consistía: en lo exterior, en el desarrollo de los vínculos económicos con el mercado mundial, para esto contaron, como es sabido, con todo el poderoso apoyo del gobierno inglés… En lo interior, conservar y extender los vínculos económicos con las provincias, el monopolio porteño de intermediación entre el mercado mundial y el mercado americano. Pero este programa porteño ya no era el programa general de todas las fuerzas revolucionarias.   Lucía Sala y equipo. Artigas, Tierra y Revolución.

En los últimos años  una vasta historiografía se ha encargado de criticar los presupuestos ideológicos que dominaron las interpretaciones sobre los procesos independentistas hispanoamericanos, al postular la hipótesis de que tales movimientos no fueron ni la manifestación de sentimientos nacionales, ni nacieron de la impugnación de sectores socioeconómicos con intereses opuestos a la metrópoli, sino que surgieron como respuesta al vacío de poder provocado por la ocupación napoleónica.  Marcela Ternavasio. Historia de la argentina. 1806-1852.

Cabe preguntarse pues cuál fue la opinión respecto al actuar  a nombre de Fernando de quienes lo guiaron en sus primeros y decisivos pasos a lo largo de 1810. En general se considera a Mariano Moreno como uno de los más decididos partidarios de esta postura, quien escribió: El misterio de Fernando es una circunstancia de las más importantes para llevarla siempre por delante, tanto en la boca como en los papeles públicos y decretos, porque es un ayudante a nuestra causa el más soberbio; porque aún cuando nuestras obras y conductas desmienten hacerles dudar cuál de ambos partidos es el verdadero realista.    Eduardo Azcuy Ameghino. Nuestra gloriosa insurrección. La revolución anticolonial de mayo de 1810.

Es difícil desentrañar el posible carácter independentista de los sucesos de 1810, principalmente porque la Revolución rioplatense no definió claramente sus objetivos…Ateniéndonos a los documentos de época, éstos fueron reiterativos en negar el propósito independentista de mayo de 1810…Manejándonos con un sentido estricto, con los hechos ocurridos, resulta claro que ni en 1808, 1809 y 1810, el Río de la plata estuvo preparado para la independencia…en esos años era un agudo descontento con respecto al régimen colonial, pero no implicaba una decisión en cuanto a una ruptura abrupta con el pasado.

Si analizamos las características de los cambio operados, la manera cómo presentaron, y el grado de participación popular en el movimiento, tendremos la pauta sobre si corresponde aplicar el término revolución o no...Los sucesos de mayo de 1810 no revelan una profundidad de cambios propia de una revolución. Apenas si produjo la desaparición de la autoridades virreinales, sin establecerse formalmente la disolución del vínculo a la metrópoli…La revolución no se hizo en una semana, sino en el correr de los años en que se fueron madurando conceptos y criterios y fue abriéndose paso una orientación diferente, nueva, con sus errores y aciertos, daría pie a la nueva nación americana.  Alfredo Traversoni. Historia del Uruguay.

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